Mucho hemos oido hablar acerca de los magos y la magia, aunque siempre desde un punto de vista lúdico, asociado a espectáculos de ilusionismo donde los magos son capaces de hacer desaparecer objetos y personas con una facilidad asombrosa. No obstante, el concepto de magia engloba un significado mucho mas profundo, lo cual la situa en un plano esotérico. La palabra “magia” procede del vocablo latino magia, del griego mageia, que a su vez puede proceder del vocablo persa magush, que significaría algo así como “tener capacidad de algo”, “tener poder para algo”.
Las fuentes de la antigüedad no siempre son generosas con los denominados “magos”: Por ejemplo, Herodoto calificó a los magoi como una grupo sincrético, conocedor de numerosos secretos relacionados con la interpretación de los sueños, sacrificios y ritos funerarios. Platón aún los consideraba con mayor recelo, calificándolos como personas que se acercaban a las casas con el objeto de convencer a sus moradores sobre las ventajas de sus supuestos poderes curativos.
Los magoi ya eran bien conocidos en la Antigüedad. De entre los numerosos ejemplos de magos famosos, podemos destacar al famoso Orfeo, hijo de Apolo y Caliope, un músico tan experto en tocar la lira que embelesaba no solamente a los seres humanos que le escuchaban, sino tambien a los animales e incluso a los rios. Triste final tuvo el afamado Orfeo, pues en su afán por rescatar a su amada Euridice del mundo subterráneo, incumplió su promesa de no mirarla durante el viaje de regreso y finalmente la perdió, muriendo él después a manos de unas mujeres frenéticas que participaban en una bacanal.
Otro de los magos mas famosos de la Antigüedad fue el mismisimo Pitágoras, de quien se decía que era capaz de estar en dos ciudades al mismo tiempo o convertir a un oso salvaje a la dieta mediterránea, entre otras muchas proezas.
En la Antigüedad comenzó a asociarse claramente la figura del magos con la del goes, que se trataba de una especie de sanador, un hechicero, un chamán capaz de comunicarse con los entes del mas allá. El término goes evolucionó mas tarde hasta convertirse en goetia, que en la Edad Media significaba Magia Negra.
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